Con Que Frecuencia Debes Limpiar Tus Artefactos Caseros
La importancia de mantener una buena higiene en la casa nunca ha sido tan relevante. Es un buen momento para corroborar qué tan frecuente debes de limpiar tus artefactos de todos los días. Atención, spoiler: Es más frecuente de lo podrías pensar.
Desde el teclado de las computadoras a controles remotos de televisión y hasta el filtro de los aires acondicionados, nunca ha existido una época mejor para mantener tu casa protegida con un antibacterial. Échale un vistazo a lo que puedes hacer para mantener tu hogar en perfecto estado.
Muebles de cocina: Todos los días
Puede que ni siquiera debería ser mencionado, pero mantener el área donde preparas la comida limpia es una gran prioridad. Cada vez que cocinas carne cruda como pollo, no es sólo que tus cuchillos necesiten una buena lavada. Los estudios han demostrado lo difícil que es conocer qué tan peligroso puede ser el esparicmiento de los gérmenes como la Salmonella, por lo que limpiar tus muebles de cocina a cada día es vital
El mejor producto para utilizar es un spray antibacterial o un producto desinfectante que elimina todos los desechos. Nadie quiere acabar con comida envenenada cuando podrías haberlo evitado al simplemente limpiar todas las superficies.
Controles remotos: Semanalmente
Además de nuestros teléfonos, los controles remotos obtienen la mayor atención en la vida de quienes están en casa. Si bien no se utilizan tanto como nuestros teléfonos, sí que constantemente los tocamos para cambiar los canales. Dado ello, necesitan atención antibacterial de vez en cuando.
Asegúrate de limpiar las teclas al menos una vez a la semana. Estos elementos necesitan ser tratados con un poco de cuidado porque si los saturas con fluidos de limpieza puedes romperlos. Quita las baterías también, sumerge un hisopo en una solución de jabón y escarba en los botones y entre los espacios. Luego de esto, límpialo con vinagre para eliminar por completo las bacterias.
Humidificador: Cada tres días
Si nunca has pensado en limpiar tu humidificador, entonces no te preocupes. No eres el único. Después de todo, los humidificadores en sí son productos de limpieza, y contribuyen a refrescar el aire. Sin embargo, esto los convierte en hogares ideales para el moho y el moho de su vecindario no tan amigable.
Las instrucciones para limpiarlos pueden diferir dependiendo la marca, pero la mayoría de las compañías coinciden en que utilizar cloro o vinagre es una buena opción. Abre ese aparato cada tres días para asegurarte que no estás respirando sin saberlo esporas de moho en lugar de las esencias de aceites. Aparte, asegúrate que tu casa es sólo un 45% húmeda. Cualquier punto después de éste podría acabar con usted viviendo con invitados no deseados.
El piso de la cocina: Semanalmente
Los pisos de la cocina se van a ensuciar, especialmente si vives en una casa con muchas personas. Usualmente se caen cosas en el piso cuando cocinas y si tienes un espacio en la cocina donde comes, es común que se derramen líquidos. Estos desastres deberían ser limpiados al instante, pero por lo general los trapeadores deberían ser pasados una vez a la semana.
Existen una tonelada de productos de limpieza para el piso que pueden matar la bacteria. Algunos de éstos ya vienen diluidos, mientras que otros se pueden armar en el balde del trapeador. Si tienes niños que tienden a tirar comida mientras se alimentan, considera trapear el piso a cada día.
Toallas: Hasta cuatro usos
Algunas personas limpian las toallas a posterior de cada uso, pero resulta que, eso puede ser contraproducente. La mayoría de nosotros utilizamos las pequeñas mantas de esponjosidad cuando recién salimos de la ducha o la bañera, lo que significa que -en teoría- permanecen relativamente libre de gérmenes.
Colocarlas a lavar después de unos cuatro usos es la mejor manera de evitar cualquier olor o bacteria no deseada. Sin embargo, asegúrate de volver a secar las toallas después de usarlas: tirarlas al piso no cuenta y podría provocar todo tipo de problemas en la piel que no son positivos.
Baño: Diariamente
Lo entendemos, ensuciarse con tu baño cada día de la semana parece un castigo reservado para aquellos que deben ir al infierno, pero confía en que vale la pena. Claramente, el inodoro es un terreno base para las bacterias que pueden crecer durante días antes de que toque la limpieza semanal.
La mejor manera de mantener a todos los que viven en tu casa a salvo de una infección es darle al inodoro una limpieza diaria. No tienes que utilizar productos llamativos; una botella de cloro cumplirá con ello y dejará tu inodoro reluciente. La limpieza diaria también ayuda a prevenir la acumulación de otras infecciones que pueden ser complicadas de remover.
Cepillos de maquillaje: Semanalmente y mensualmente
Irónicamente, las personas con acné tienden a utilizar maquillaje de manera más frecuente de aquellos que no, pero los cepillos sin lavar pueden contribuir con el problema. Si aplicas maquillaje en tu baño y lo dejas en los cepillos sobre las mesadas, ello se puede convertir en una cuestión inimaginablemente sucia. Aún si los quitas del medio, necesitarás de limpiarlos.
Cualquier cepillo que se utilice para productos mojados debería de cumplir con una buena limpieza con jabón de manera bi-semanal. Esto se aplica especialmente para esponjas que en ocasiones tienen moho en todo su ser. Los cepillos con productos secos pueden ser limpiados de manera mensual ya que no son propensos a generar bacterias.
Filtros de aire acondicionado: Mensualmente
Si vives bajo un clima cálido, entonces el aire acondicionado es un regalo del cielo completo. Tener una unidad es esencial para hacer la vida más cómoda, pero asegúrese de limpiar esos filtros mensualmente. Nadie quiere estar inhalando una lluvia de tierra y polvo.
Para mantener el aire dentro de su casa de primera categoría, saque esos filtros y dales una buena limpieza, o si es posible, reemplácelos por completo. Si la unidad de aire acondicionado o el calentador están en su habitación, esto es particularmente importante para evitar que respire gérmenes dañinos mientras duerme.
Afeitadoras: Reemplácelas una vez cada dos semanas
Muchas personas tienden a utilizar sus afeitadoras hasta que pierden su filo, pero esto es un hábito potencialmente peligroso. La piel muerta y el pelo viven en las afeitadoras y dan lugar a bacterias que pueden llevar a desagradables infecciones como el impétigo. No sólo ello, sino que las afeitadoras que no están limpias pueden ser dolorosas de utilizar y causar cortes, permitiendo que los gérmenes ingresen en tu sistema.
Idealmente, las afeitadoras deberían de ser reemplazadas una vez cada dos semanas, dependiendo en qué tan frecuencia las utilices. Cuando las afeitadoras no se utilizan, colocarles una tapa protectora pueden ayudar a mantenerlas sanas.
Tu smartphone: Diariamente
Cuando piensas en limpiar la casa, la mayoría de las personas de inmediato piensan en los muebles de la cocina y los platos sucios. Muchos de nosotros fallamos en no pensar en nuestros smartphones, aún cuando no los toquemos de manera frecuente en el día.
Nuestros celulares van a donde nosotros vamos, desde los bares a la oficina, y hasta -en algunos casos- ¡al baño! Esto lo vuelve perfecto para que se cree una bacteria allí. La mejor manera de limpiar tu celular es frotándole alcohol en él, pero asegúrate de corroborar con la empresa que lo fabrique antes de hacerlo. ¡Lo último que quieres es cometer un error costoso!
Lavaplatos: Mensualmente
Los lavaplatos se encargan de los platos, pero éstas también necesitan ser lavadas en sí mismas. Sólo imagínense todos los pequeños pedazos de comida que se quedan atascados en éstas. No es saludable. Cada mes, asegúrate de limpiarla con estos pasos.
Limpia el frente de la máquina con una mezcla que contenga jabón. Quita los filtros y asegúrate de que estén vacíos. Limpia todas las partes que sobresalgan del lavabo. Finalmente, coloca dos copas de vinagre blanco en la parte inferior y pon el ciclo común de lavado. Ello debería eliminar todas las bacterias.
Alfombras: Semanalmente
No es un secreto que las alfombras se ensucian por cualquier motivo. No sólo que caminas en éstas sino que se suelen caer elementos sobre ellas de manera frecuente. Pueden convertirse en la base de gérmenes, pelos de animales, piel muerta y polvo.
Todas las alfombras deberían ser limpiadas con una aspiradora al menos una vez a la semana. Dependiendo en el número de mascotas y la cantidad de veces que la pises en tu casa, podría valer la pena hacerlo más que una vez a la semana. Si es posible, las alfombras deberían ser tiradas en el lavarropas para mantenerlas limpias.
El teclado de la computadora: Semanalmente
Una increíble cantidad de personas trabaja con computadoras de manera diaria, ya seas un freelancer que clikea las teclas en su casa o un administrativo en una oficina. Los teclados de la computadora y el ratón son perfectos para que algo se geste allí.
Los microbiólogos concuerdan que éstos deberían de ser limpiados al menos una vez por semana con alcohol, pero si estás buscando un panorama sin gérmenes -como lo que se hace en el hospital o en cualquier facilidad sanitaria- debes de hacerlo al acabar cada día para que el contagio no se disperse. Esto es aún más aplicable si trabajas con alguien más.
Muebles: Mensualmente
Es posible que los muebles tapizados nunca hayan aparecido en su lista de tareas pendientes, pero es hora de agregarlos. Las telas tienden a aferrarse a casi cualquier costa, especialmente en un hogar familiar. Es importante sacar la aspiradora y usarla para darle una buena limpieza a su sofá y otros muebles cada mes.
Si es posible, retire las fundas de los cojines y póngalos en el lavado, pero tenga cuidado de seguir las pautas según el tiempo de material. También es recomendable contar con la ayuda de un servicio profesional de limpieza de tapicería dos veces al año para mantener ese sofá en la mejor forma.
Cortinas de la ducha: Mensualmente
¿Has lavado en alguna ocasión la cortina de tu ducha? Podría parecer limpia el día que la compraste pero, es muy probable, que esté llena de bacterias. En un ambiente enmohecido, es el ideal para que cualquier bicho crezca. Lo que es peor, entra en contacto con tu piel. Lo mismo sucede con el vidrio y las puertas.
De ser posible, toma tu cortina de ducha y colócala en la máquina para lavar. Si no es posible, una solución de vinagre blanco mezclado con unas gotas de tu esencia favorita podría ayudarte a desinfectarla y también deshacerte del olor. Esto funciona tanto para las cortinas como para el vidrio y debería de protegerte de bacterias que allí crezcan.
Ropa de cama: Semanalmente
No existe algo mejor que el aroma fresco de la ropa de cama, ¿no? El adentrarse entre las sábanas cuando acabas de cambiaras te da una sensación única que nunca dejarás de disfrutar. Además de que, realmente cambiarlas es un trabajo duro.
En realidad, la ropa de cama recolecta la piel muerta, sudor y fluidos corporales, lo cual lleva a alentar a los ácaros del polvo. Si no quieres compartir tu cama con esas pequeñas criaturas, asegúrate de lavar la ropa de cama al menos una vez por semana. Si sudas mucho o tienes mascotas en tu cama, podrías considerar de cambiarlas de manera más frecuente.
Marcos/ Ornamentos: Semanalmente
Mantener ese polvo fuera de las imágenes familiares y demás decoraciones no sólo se trata de ser limpio, es para mantener una mejor apariencia también. Nadie quiere exhibir una hermosa foto con una capa de mugre. Si sufres de alergias, ésto es una particularmente importante.
Cada semana, utiliza un plumero para repasar la limpieza de tus cuadros. Si padece de fiebre del heno, podría descubrir que esto le ayuda en los meses de verano, pero es una buena idea hacerlo durante todo el año. Despídase de los molestos ácaros del polvo y el polen persistente de una sola vez, sólo asegúrese de tomar un antihistamínico de antemano si es sensible.
Persianas/ Cortinas: Cada cuatro meses
El tener que descolgar un juego de pesadas persianas o limpiarlas es un trabajo que a ninguno de nosotros nos gustaría hacer, pero es necesario. Por suerte, es un hecho que deberías de hacer cada cuatro meses, y no semanalmente. El limpiar las persianas con agua caliente y jabón ayuda a que el polvo desaparezca, creando un ambiente más saludable.
Idealmente, las persianas deberían de ir en la lavadora pero si no es posible, llévalas al jardín y sacúdelas para quitarle el polvo. Puedes rociarlas con una solución antibacterial. Si tienes una máquina de vapor, esta es muy efectiva, y también que algunas compañías también ofrecen un servicio a la casa.
Ventiladores de techo: Cada tres meses
Tener un ventilador de techo es un lujo y es perfecto para mantener el aire en movimiento en tu casa. Sin embargo, como estos tienen aspas, es un lugar perfecto para que se llene de polvo. Cuando lo activas, esto quiere decir que los ácaros se dispersan por todo el lugar.
Si los repasas una vez con un limpiador y por semana, sería muy beneficioso, pero si no puedes alcanzar las aspas, una vez cada tres meses es lo aconsejable. De esta manera, las alergias se mantendrán fuera y tu familia no estará estornudando en la sala de estar.
Corpiños: Una vez cada tres o cuatro usos
A diferencia de cualquier otra ropa íntima, los corpiños no necesitan ser lavados cada vez que los utilizas. El mantenerlos durante tres o cuatro veces que lo vistes puede hacerte sentir culpa, pero no te dañará. Sin embargo, no existe una regla aquí. Si eres de sudar mucho, entonces es importante lavarlos de manera más frecuente.
En este caso se vería dependiendo de la persona, pero en general, la regla es que cada cuatro días como máximo. Lánzalos en la lavadora junto a otras prendas delicadas. Un truco: Evita usar suavizante o detergente para telas demasiado perfumado, ya que esto podría provocar irritación.